lunes, junio 05, 2006

Humo, acordeón y tango




Humo, acordeón y voces gastadas por años de tangos. El escenario es uno de los bares más antiguos de Valparaíso: el Cinzano.


Viejo y algo sordo, el cantante camina entre las mesas para acercarse a las clientas y actuar una seducción gastada, pero experta.



Miro una foto que hay frente a mi mesa: allí en el muro, 20 años antes, un hombre entra al bar con paso apurado. Hay tantas imágenes de famosos que creo ver la escena como una prueba; el registro de Marcello Mastroianni entrando al lugar. Me dicen que estoy equivocada, pues se trata del mismo hombre que canta a mi oído con una pasión senil.

Entonces recorro los otros enmarcados y veo actrices de teleseries, políticos y antiguas fotos del puerto. Entre todas las imágenes, hay un montaje que dice:

“El cineasta Luis R. Vera, dirigiendo la película Consuelo, 1987”




Con detención observo cada detalle, cada personaje que retrata ese instante, hasta que la encuentro en un rincón.


Allí, en el borde izquierdo de la foto, como a un fantasma, distingo a mi madre con el típico sombrero alón que solía usar en aquella época. Veo su falda, sus botas, el pañuelo al cuello y la mano en su boca, como siempre que está pensando.

Ella fue directora de arte de esta película rodada en Valparaíso cuando yo tenía 11 años. Fue en ese trabajo que la Pilo conoció a Rodrigo, el padre de mis tres hermanos menores (Julián, Gabriela y Luciano). Él, asistente de dirección de este filme sueco-chileno, también aparece allí, de espaldas, sentado en la barra.

Mientras las voces siguen acompañando nuestra noche, les cuento a mis amigos la historia de la foto, entonces viene la nostalgia y la memoria se vuelve al blanco y negro, se vuelve niñez en los cerros, se vuelve vino tinto y bar, con olor a humo y sabor a tango.

9 comentarios:

Loredana Braghetto dijo...

Notable Paloma.
Es que tu vieja la lleva. No sabía su pasado al más puro estilo Cine-Cittá.
Este post está de película.
Besototes.

Anónimo dijo...

Palomita el puerto esta lleno de magia y de lugares inimaginables, que ya tendras tiempo de conocer de la mano de Ignacio y de la mia. En cada recoveco te encontraras con una maravillosa sorpresa, como ya lo experimentaste en en el Cinzano esa noche. El puerto te espera, no tarde el llegar a la cita
Te quiero mucho

Consuelo dijo...

me gustó tu blog, especialmente el comentario del cinzano, algo qeu trae muy lindos recurdos con alguien que quiero mucho...me gusta ese aire a antiguedad, tango y sangría, que sirve de refugio parala humedad nocturna del puerto. No tenia idea que existía una película con mi nombre...!

Vivi dijo...

Hola paloma!!!
Que emocionate debió ser encontarse con una imagen donde aparece tu mamá,cierta especie de orgullo no??
Tu madre sabía que esta en un lugar tan caracteristico y tan honorable como es el zinsano?? o para ella tambien fue una sorpresa??
Cabe destacar tu buena y excelente vista, para poder identificar a tu madre...
Yo en un par de dias viajo a Valpo, es mi ciudad favorita, me encanta, mi sueño es vivir alla...

Cainista dijo...

Que simple y bella imagen tu historia, Paloma
Gracias

Besos
Caín

bitacoreta.org dijo...

Paloma querida, Te mando un saludo desde Washington. Estoy sorprendido por lo que escribes respecto a Valparaíso, hay que boicotear al supermercado que se construye, en todo Chile. Hay que copar la casilla de Unesco con reclamos, hay que insistir con los medios.

Acá estamos con la visita ilustre de Bachelet. Ni pensar en hablar con ella, no me consideraron ni para cargarle la maleta. De acercarse menos, una tropa de chupamedias, semidioses y divos se arrastraban a su alrededor. Que se le vá a hacer.

Un besote.-

retamal.org

Anónimo dijo...

Saludos...llego a tu blog siguiendo el hilo de amistad de "tan lejos tan cerca" y "prejuicios y juicios" y me gustó mucho lo que encuentro y espero encontrar...
agradecido.
Volveré.
Alex.

Juan Carlos dijo...

Genial como la realidad ha capturado un cuadro de ficción que a su vez, ha capturado una parte de la realidad en un desplante de magia recursiva.

A veces la ficción no es más que la realidad mordiendo su propia cola.

Saludos

Anónimo dijo...

Excelente foto, la del cantante y tu cuello. Me entero de que todavía vive ese compañero de farras inolvidables. Saludos. Javier