martes, julio 26, 2005

Una gruta en la ciudad

Esta fue la segunda entrega que escribí en enero de 2005 para la revista de panoramas de la que hablé anteriormente. Mis trabajos aparecían en la sección “Mirada Urbana”. Así es como veo mi ciudad.

Siempre trato de cambiar la ruta cuando camino por el centro de Santiago. Descubrir nuevos lugares, detenerme y mirar. El último hallazgo fue una caverna. Sí, como leen, una caverna en medio de la ciudad.

Llegué cruzando la Plaza Benjamín Vicuña Mackenna, ubicada en la intersección de la Alameda Bernardo O’Higgins y Miraflores, a un costado de la Biblioteca Nacional. Allí, en la ladera poniente del Cerro Santa Lucía, como si fuera un trozo de tiempo petrificado de la época de la Conquista o de la Colonia, existe un refugio que alberga al Centro de Exposición de Arte Indígena, espacio muy visitado por turistas, pero poco conocido por los habitantes de la capital.

La caverna que ocupa el centro artesanal es casi tan antigua como la urbanización del cerro. Sin embargo, recién a principios de los ‘90 un grupo de artesanos, respaldado por la Corporación Nacional de Desarrollo Indígena (CONADI), propuso dar un nuevo destino al lugar que hasta ese momento se utilizaba como depósito de basura.

Tras cuatro años de gestión, el 25 de septiembre de 1996 se inauguró este centro, que cuenta con 12 locales donde es posible encontrar artesanía mapuche, rapa nui y aymara.

Entre telares, vasijas y joyas, Juanita Queupumil, una de las locatarias, me explica que al principio el espacio no estaba del todo cerrado, por lo que su habilitación significó completar el muro exterior de la gruta. En el piso, las baldosas también fueron dispuestas respetando patrones geométricos típicos de los dibujos decorativos mapuches, lo que contribuye al aspecto sobrecogedor e integral del lugar.

¿Qué venden? La oferta es variada y muy interesante. Tejidos en lana de oveja y alpaca, objetos de greda, joyas de plata, máscaras, fuentes y utensilios de madera de raulí, flautas y ocarinas. En los puestos rapa nui tienen reproducciones de moais, collares y variados objetos de miro tahito (madera) y maea (piedra volcánica), elementos propios de Isla de Pascua.

Fresco en verano y agradable en invierno, el centro efectivamente ofrece una muestra de alto nivel de nuestros pueblos originarios y no aquellas mezclas de productos importados y en serie que exhiben en muchas ferias que se dicen artesanales.

Con todo, este es un espacio ideal para hacer un alto en el centro y librarse del calor y el ruido. Casi un viaje en el tiempo, que también permite apreciar objetos propios de los pueblos indígenas, uno de los aspectos más ricos y profundos de nuestra cultura.

Centro de Exposición de Arte Indígena
Av. Libertador Bernardo O’Higgins 499
Teléfono: 632 3668
Horarios: Lunes a sábado 10:00 a 19:00 (verano), 10:00 a 18:00 (desde abril)
Entrada liberada

sábado, julio 23, 2005

“EPIC”: El Futuro es Hoy

“Es el mejor de los tiempos. Es el peor de los tiempos. Todos participan, todos colaboran... La prensa, tal como se la conoce, ha dejado de existir”

Varias veces he dicho que me abruma el avasallador surgimiento y desarrollo de los blogs, el avance que tiene el mundo de Internet e Internet en el mundo. En una obra cercana a la ciencia ficción encontré la respuesta a varias de mis preguntas y vi el futuro. Porque el futuro, señoras y señores, es HOY.

Se trata de “EPIC 2015”, un documental de ficción creado por los estadounidenses Robin Sloan y Matt Tompson, del centro de estudios mediales The Poynter Institute (Florida, EE.UU.). Con 10 minutos de duración y “ambientada” en 2015, la película flash hace un estudio retrospectivo sobre los medios de comunicación desde el surgimiento de Internet, hasta ese año, cuando el panorama mediático tal como lo conocemos ha cambiado radicalmente: El New York Times ha cerrado su versión web, Google y Amazon se han fusionado y… Tienen que verlo.

No sé qué será de mí en una década más, pero la teoría de EPIC me pareció estremecedoramente real. De hecho, creo que me gustaría trabajar por y para ellos, como creadora y filtradora de contenidos.

Leí un artículo en Poyter, donde Thomposn cuenta que la primera versión, “EPIC 2014” fue publicada en noviembre de 2004. Explica que la idea del fantástico relato del supuesto Museum of Media History (Museo de Historia de los Medios), comenzó a gestarse mientras conversaban en un bar de Miami sobre un discurso de Martin Nisenholtz (CEO de New York Times Digital) sobre el futuro de los medios.

Así surgió esta obra que toma como elementos de análisis el desarrollo de las tecnologías de la información y la comunicación, así como la forma en que los usamos para comprar, ver televisión, relacionarnos con otras personas e informarnos.

Thompson cuenta que pensaron en un juego de rol online, donde la participación colectiva va alterando las características del juego e incluso sus reglas. “¿Qué pasaría si fuera posible aplicar ese modelo al periodismo?”, se preguntaron. “¿Qué pasaría si la gente pudiera crear y afectar las noticias simplemente leyendo, mirando o escuchándolas?”.

Me encantaría seguir hablando del fascinante y, por momentos aterrador, panorama que presenta EPIC para analizar cuál será el rol de los periodistas en un mundo con millones de fuentes que dan a conocer lo que saben, creen y sienten directamente en el web. Pero creo, que este es el momento para que la audiencia intervenga el contenido. Quiero escuchar a los ingenieros, diseñadores, filósofos, publicistas, artistas, bloggers. Quiero descifrar lo indescifrable en la voz de todos, en las palabras que dan vida al Libro Universal. A nuestra Biblioteca de Babel.

Más datos:

- EPIC es la sigla de Evolving Personalized Information Construct (Construcción de Información Personalizada en Evolución). Es decir, el sistema por el que el creciente caos informativo de los medios sería filtrado, ordenado y luego distribuido.

- A diferencia de la versión 2014, en la actualización 2015 los autores incluyen temas relacionados con el iPod y los podcast.

- No he encontrado bloggers chilenos escribiendo sobre este tema, pero destacados periodistas argentinos han aventurado diversos análisis sobre EPIC.

- Con música original de Aaron McLeran y con el relato de Matt Thompson, el audio y la música de la película son muy agradables, pero está en ingles. Aquí es posible leer una versión traducida del texto de EPIC 2015 y aquí está la versión 2014 con subtítulos, aunque no siempre corre bien.

martes, julio 19, 2005

Revisitando la Plaza de Armas

En diciembre de 2004 comencé a escribir una serie de artículos para una revista de panoramas que, actualmente, está en proceso de reorientación. Como no quiero que estos escritos se pierdan en el tiempo, he decidido compartirlos a través de mi blog. Qué mejor lugar para exponer esta “Mirada Urbana”.

Estoy en el Museo Histórico Nacional realmente impresionada con Ulk, el gran danés del ex Presidente Arturo Alessandri Palma. Está embalsamado pero me mira como si en cualquier momento fuera a ladrar.

Es, sin duda, uno de los elementos más curiosos de esta antigua construcción sobre la Plaza de Armas, que fue edificada para acoger al Palacio de la Real Audiencia. También resultan llamativos un par de cuadros del pintor inglés Thomas Somerscales; salitre auténtico y billetes de los bancos de Melipilla, Caupolicán, Ñuble y del Banco del Pobre.

Casi termino el recorrido cuando veo a una pareja de extranjeros acompañados por un guía. Les pregunto si me puedo unir y comienzo a escuchar las interesantes explicaciones del joven que trabaja los fines de semana como voluntario.

Luego de un rato me pongo a conversar con ellos. John Coker y su esposa Virginia viven en San Francisco, EE.UU., y él habla muy bien español, pues su madre era mexicana. Quieren conocer más de la Plaza de Armas y me ofrezco a ayudarlos.

Visitamos el bello Museo Postal y Telegráfico reinaugurado a la entrada del Correo y en la esquina de Monjitas con Puente, les muestro el reflejo de la Catedral en la fachada del Edificio Plaza de Armas, lo que se ha convertido en una recurrente imagen turística de Santiago. Abajo comienza la “Pequeña Lima”, con sus restaurantes y centros de llamadas, punto de reunión para cientos de peruanos que inmigraron a nuestro país en busca de mejores oportunidades.

Luego pasamos fuera del Restaurant Marco Polo, donde un grupo de turistas daneses disfruta sus platos de pescados y mariscos. En la explanada hay gente jugando ajedrez, cesantes, predicadores, magos, fotógrafos, pintores y un peluquero, que por mil pesos ofrece “arreglar los desastres que han dejado otros”. John dice que no necesita este peculiar “servicio a la comunidad”. Yo tampoco.

En Ahumada con Compañía entramos a la “esquina de la suerte”, el lugar donde más se juega en Chile. Ubicada allí hace unos 40 años, esta agencia de lotería ha entregado varios de los premios históricos. A mis nuevos amigos les llama la atención como las personas miran en las vidrieras buscando sus números favoritos, realizan algunas cábalas y luego pagan el boleto con los ojos llenos de sueños.

Terminamos en el Portal Fernández Concha. Se acerca la hora de almuerzo y decidimos entrar al “Ex Bahamondes”, fuente de soda que hace dos décadas fue la primera en ofrecer hot dogs de 30 centímetros. Pedimos unas cervezas bien heladas y brindamos por esta nueva amistad que me permitió revisitar el eje de Santiago, un hito urbano de fuertes contrastes, que tiene tanto de conocido y tanto por descubrir.

martes, julio 12, 2005

Último concierto

Silvia y Lizardo todavía están en Chile y mañana miércoles ofrecerán su último concierto en “El Sindicato”, un lugar que ha sabido mantener vivo el espíritu de Peña de los ’80, por lo que sin duda vale la pena conocerlo.

El recital es a las 21:00 horas y me imagino que cobrarán una entrada que no superará los $2000 pesos.

Pero antes de eso, a las 19:30 iré al Museo de Arte Contemporáneo (Metro Quinta Normal) a presenciar la conferencia sobre arte y ciencia: “El cerebro del Chamán: investigación neurobiológica e instalaciones bio-electrónicas”. Me tinca muchísimo.

Todo está en el Barrio Yungay, a pasos del Barrio Brasil, sectores donde se han instalado diversos bares y cafeterías que vale la pena conocer. Esto último lo dejo para mis amigos de tiro largo, porque yo, señores, tengo horario “de matinal”.

El Sindicato: Mipú 424 (entre Compañía y Catedral), Barrio Yungay, Metro Quinta Normal.

lunes, julio 11, 2005

Con cariño para Francisco

Como muchos domingos, me quedé dormida pensando, proponiéndome ser mejor persona, trabajar más y gozar cada minuto de la vida. Así y todo comencé mi lunes, como cada lunes, con bastante sueño, pero con ánimo. Entonces llamó Carla para contarnos que Francisco había muerto el sábado por la tarde.

Conocí a Francisco en abril del año pasado cuando postuló, como varios otros estudiantes de periodismo, interesado en hacer su práctica profesional a mi cargo. Francisco fue uno de los mejores y trabajó con profesionalismo y entusiasmo durante seis meses haciendo, desde su casa o desde la universidad, las notas que yo le encargaba.

Todavía lo recuerdo entrando a mi oficina, acompañándome, revisando sus artículos juntos. Para mí era un niño, lindo y trasparente, con un gran futuro profesional. Lo veía en sus ojos, en las ganas que ponía en cada cosa, en su interés por aprender. No sé si fui su mejor profesora, creo que él me enseñó mucho más a mí, por sus sueños, por su idealismo. También lo veía triste cuando tenían paros en su universidad, porque creo que le gustaba mucho ir a clases y compartir esa amistad pura y sólida que tenía con Carla.

Hoy hablé con ella. Me contó que Francisco salió a caminar el sábado por la tarde, que le dio un aneurisma cerebral y nunca más volvió. Yo tampoco lo veré más entrar a mi oficina, aunque recuerdo nítidamente su tímido saludo, sus ojos bien abiertos, sus historias y su luz.

No pude ir a su funeral esta tarde. Aunque habíamos perdido el contacto en los últimos meses, el dolor es fuerte. El recuerdo también. La pena es más profunda cuando pienso en todo lo que tenía por vivir, pero también siento algo de consuelo, por cómo era, por la pasión que ponía en su vida, por haberlo conocido.

Francisco Bustos tenía 23 años, estudiaba periodismo en la Universidad de Santiago y le apasionaba el periodismo científico. Un joven sacrificado y estudioso, con mucha garra. Seguramente hubiese sido un grande en estas lides. Para mí siempre lo será.

Mis sentidas condolencias para su familia y sus amigos. Para Francisco, mi cariño y admiración. Siempre te recordaré.

viernes, julio 08, 2005

Terror en Babel

El senador Fernando Flores escribió en su blog sobre personas y medios de comunicación que relatan el atentado de Londres a través de bitácoras online. En El Mercurio de hoy viernes también hay una nota al respecto.

Lo cierto es que cada día me sorprendo más con la revolución informativa que traen consigo los blogs. La posibilidad de conocer diversas realidades y visiones sobre las cosas es abrumadora.

Estoy pensando mucho en Borges, en la Biblioteca de Babel, en el libro universal. En alguna parte de todo esto debe estar la respuesta para detener el terror.

¿Por dónde comenzamos la búsqueda?

martes, julio 05, 2005

Si se la sabe… Cante

No lo puedo evitar… soy muy buena “pa’ meter la cuchara” (opinar en conversaciones ajenas o diálogos en que no se ha sido invitado). En el fondo tengo espíritu de cubano en Miami. De esos que conversan con todo el mundo y opinan de todas las cosas. Pero, al parecer, no soy la única.

Sentada en la micro rumbo a un taller para periodistas. A mi lado un hombre mayor, uno de esos jubilados que parecen extras de comerciales para la tercera edad, con sombrero alón y todo. Atrás, una abuela y su nieta de ocho años. La mujer acurruca a la niña y le canta una canción de cuna. “Arru ru mi niña, arru ru mi amor, duérmete muñeca de mi corazón”. El anciano se da vuelta y la corrige: “… duérmete pedazo de mi corazón”. “Ay sí, tiene razón”, dice la viejita y sigue cantando. El hombre complacido dibuja una sonrisa en su rostro, como si la meta del día estuviera cumplida.

Lo mío es más descarado y peor, porque la meta no se cumple nunca. Lo más raro de todo es que mi particular mala memoria desaparece cuando se trata de conversaciones de otros.

En la sección de verduras del supermercado dos reponedores comentan lo guapa que es una chica, una de las cajeras que según escucho se viste siempre de rosado.

- Es igualita a una de las actrices de la novela
- ¿De cuál novela?
- Esa que sale en “Brujas”, la… Antonela algo…

“Ríos”, le digo yo, “Antonela Ríos”. Así es este espíritu loco que me tocó. Ellos me dan las gracias por mi respuesta. Hay quienes se ríen y otros que se enojan, los menos, por suerte. Ejemplos tengo muchos más, como cuando la gente conversa en la fila del banco o en el metro y están tratando de acordarse de un nombre de un libro o una película y yo les completo la frase. Incluso a veces les pido más antecedentes.

- Disculpe que me meta, pero ¿usted habla de esa en que Harrison Ford es un arqueólogo? - pregunto.
- Sí, esa misma.
- Se llama Indiana Jones, pero hay tres partes, usted seguramente vio la del Arca…

Mejor ni explico cómo gozo cuando en la televisión dan programas con concursos del tipo de “Si se la sabe… Cante” o “Quién quiere ser millonario”, lo raro es que siempre los participantes cantan o contestan mucho antes que yo… Entonces comprendo aliviada que no soy la única… Existen peores.

lunes, junio 27, 2005

Es verdad

Esteban no pudo creerlo cuando leyó la noticia en “El Mercurio”, pero yo se lo confirmé: frente al Mercado Central se instala un hombre a vender leche de burra ¡y anda con los animales!

- ¿Por qué no me contaste? – preguntó abriendo los ojos muy grandes.
- Porque no creí que te interesara. Veo tantas cosas extrañas, que no pensé que fuera algo fuera de lo común.

Y efectivamente los había visto varias veces, al hombre y sus dos burras, mientras camino desde el otro lado del Río Mapocho rumbo a casa. Sin ir más lejos, el otro día se pusieron junto a mí para cruzar en la luz verde y un par de mujeres se acercaron a comprar.

- ¿Cuánto les doy caseritas?- preguntó el “lechero” a sus clientas.
- Yo quiero un vasito corto para tomar acá no ma’ y a mi hermana dele medio litro pa’ llevar a la casa- respondió una de ellas.

El hombre, obediente, llenó un vaso y echó algunas medidas dentro de una bolsa transparente que anudó con cuidado.

Como mis conocimientos lácteos son bastante restringidos, hice una de esas preguntas estúpidas y retóricas (como cuando voy a un restaurant o a una pastelería y pregunto a al garzón o la dependienta si es rica tal o cual torta, sabiendo que siempre su respuesta va a ser afirmativa). Pues bien, pregunté a las clientas si era rica la leche de burra. Pero la respuesta vino del “lechero”.

- Muy rica caserita ¿nunca la ha probado? Es rica en vitaminas y minerales- me dijo insistiéndome en que probara “un dedito” en un pequeño vaso que tenía.

Aunque el hombre estuvo lejos de convencerme, seguía intentándolo cuando llegó una pareja de carabineros y le dijeron que se fuera, qué estaba prohibido vender leche con esas condiciones de higiene, sacada directamente de las ubres del animal, ahí en medio de la calle. “Pero si mis animales están sanitos, oficial”, reclamaba el hombre. “¿Y usted cómo lo sabe?”, increpaban los policías... “Ya, ya, ya, váyase no más, si no quiere que lo llevemos con burras y todo a la comisaría”.

El “lechero” dio media vuelta y comenzó a alejarse lentamente con sus animales. A esas alturas yo había perdido varios semáforos verde por estar parada mirando, como si fuese invisible.

Empece a cruzar la calle con las demás personas, mientras me reía de la situación, pero hasta que Esteban lo vio en el diario, nunca pensé que era algo fuera de lo común. Parece que algunas cosas que me suceden, no son del todo normales.

lunes, junio 20, 2005

Un año interconectada

Gracias a la sugerencia del Tuco y la paciencia de Felipe, a mediados de 2004 nació este espacio donde, en forma semanal, me propuse plasmar ideas mezcladas con algunas cosas que pasan frente a mis ojos. Desde entonces, con más frecuencia de la habitual, mi vida comenzó a tejerse de coincidencias y cruces hermosos y raros.

Conocí a Roberto Arancibia, quien para mí y muchos otros es el padre de los bloggeros chilenos, y además resultó ser amigo de infancia de mi padre y mis tías. Un comunicador hiperactivo que nos reúne y nos incentiva “sin querer queriendo” a crear a partir de nuestras experiencias. Desde entonces han pasado muchas cosas y me he reencontrado y conocido real y virtualmente a muchas personas.

La retroalimentación que he recibo es un tema aparte. Uno de los hechos que más me conmovió fueron los mensajes de Armando, quien vive en Estados Unidos y, durante sus años en Chile conoció a Bernardo Baytelman, el Beco, mi abuelo paterno. El Beco era un ser mágico y luminoso, que marcó la vida de mucha gente. Murió muy joven, a los cincuenta y tantos en el exilio, en México. Mis recuerdos se confunden en la memoria de los otros, como la de Armando, a quien mi abuelo ayudó durante un incidente antisemita que ocurrió en Santiago hace más 40 años.

También son muchos los que han llegado al blog porque estudiaron en el Latinoamericano de Integración, o tienen alguna afinidad con este colegio que marcó una parte importante de lo que soy y que ha inspirado varios de los escritos que habitan este lugar.

El mundo del blog me llevó a conocer personalmente y tras una cuota preocupante de casualidades a Agnes, quien tiene un parecido onírico con mi madre, lo que supongo se relaciona con sus genes rusos. En lo virtual no puedo dejar de mencionar a Ceci, mi amiga y colega que está en Vancouver, con quien compartimos una forma muy parecida de mirar y contar las cosas, aunque sé que en la vida real ella es mucho más tímida que yo, y en lo profesional, más matea.

Como algo curioso, puedo citar que hace poco me escribió Nibaldo, creador de zurdos.cl, pidiéndome que le explicara cómo les enseñé a mis hermanos a tejer. Asimismo, recibí un comentario de agradecimiento de Rolando Báez, curador del Museo La Merced, con quien nos juntamos a tomar un café y también estamos tejiendo una amistad con lana colorinche de gustos e intereses en común.

El blog tampoco ha estado exento de polémica, como la que viví junto a Roberto, por una señora italiana hija del pintor Ottorino Mancioli, que creyó que estábamos ofendiendo a su padre, cuando la idea era destacar su obra. Caso aparte fue Sara, quien apasionadamente me conminó a escribir sobre temas verdaderamente importantes, como los que le dolían y le duelen a ese Chile que ella conoce desde su vida en Nueva York.

Para seguir con las conexiones, está Ewa Kulak, quien por estos días está en Polonia presentando el libro que compila algunos de sus escritos. Siento por ella una admiración cyber-cultural-literaria, por la bella forma en que transmite la y las culturas que la rodean, más allá de muchas fronteras. Fue muy emocionante cuando destacó mi blog en su sitio web, todo un honor viniendo de esta polaca tan patiperra (traducción: buena para recorrer el mundo). También ha sido increible tener en Chile y en mi casa a su cuñano Lizardo y a la encantadora Silvia.

Además de todo esto, el blog sirvió de vitrina para que me ofrecieran escribir una columna mensual sobre temas principalmente urbanos en el Revista Santiago Entretenido, espacio donde he escrito sobre la Plaza de Armas, la Feria de Artesanía de los Publos Indígenas en el Cerro Santa Lucía, la Confitería Torres, el Tren del Vino, el Museo de La Merced, la Bienal de Sao Paulo en el Mac, el Palacio Cousiño y la Plaza Las Lilas.

No puedo finalizar este desordenado y (para mí) emotivo recuento sin agradecer a ESM, mi más fiel y crítico lector, quién me acompaña en muchos de los relatos antes que sean “papel”, quien comparte mi vida y dentro de mis ojos mira las cosas que veo.

lunes, junio 13, 2005

Otoño por la ventana

Me dormí con las cortinas abiertas de par en par y la televisión encendida. En mitad de la noche cuando desperté buscando el control remoto para apagarla, una imagen se filtró por el rabillo de mi ojo. Como un fantasma, como esas cosas que no deben estar allí, pero están.

Miré por la ventana y no vi nada extraño, sólo un viento muy fuerte que movía la copa de los árboles y el ruido de la lluvia contra el techo de los edificios cercanos.

Entonces empezó nuevamente. Como murciélagos en la noche las hojas de los árboles comenzaron a bailar en el aire, subiendo y dando giros hacia el cielo, ignorando la gravedad. Venían desde lejos a jugar en mi ventana y pude verlas allí, mágicas, haciendo un mundo al revés con una danza de otoño, que viví como un sueño sentada en la orilla de la cama mientras tú dormías a mi lado.

lunes, junio 06, 2005

Silvia y Lizardo en Chile

(*Miren el calendario de presentaciones de Silvia y Lizardo al final de este post)
Una de las cosas más entretenidas que me ha pasado en las últimas semanas fue conocer a esta pareja de colombianos, que el último viernes de mayo me esperaban cansados y con mucho frío en la estación de metro Bellas Artes.

Allí les propuse juntarnos, pero la historia es más larga. Por este maravilloso y endemoniado mundo de los blogs conocí a Ewa Kulak. Nacida y criada en Polonia un día Ewa se enamoró de un hombre del continente americano y decidió ir a vivir con él a su país. Así, después de estudiar filología en la ciudad polaca de Poznań y realizar una Licenciatura en la Lengua Española en la Madre Patria, aterrizó en Colombia.

Es una mujer muy entusiasta que ha trabajado en múltiples cosas, interesándose profundamente por la cultura y la gente de esta tierra del café. De hecho en su blog escribe sobre estos temas y acaba de publicar un libro que recoge sus mejores historias.

Pues bien, Ewa me escribió hace algunas semanas contándome que su cuñado Lizardo Carvajal y su novia Silvia Valencia, venían viajando hace cuatro meses por “El Gran Indio Verde”. Al poco leer entendí que se trataba de una aventura épica, con la que el trovador y la cuentista, buscaban interiorizarse de las raíces más profundas del continente, al mismo tiempo que dar a conocer su música y sus historias.

“Ya están en Santiago”, decía Ewa en una de sus cartas cibernéticas y yo, hiperkinética, no demoré en contactarlos y darles varias ideas de lugares para presentarse en mi ciudad, muchos de los cuales ellos ya habían visitado en los días transcurridos antes de conocernos.

Nuestros encuentros han sido de pizza , historias de viajes y música. Primero en mi casa y luego en la entretenida reunión de bloggers chilenos que se llevó a cabo el domingo 5 de junio. Sin estar dadas las mejores condiciones de espacio, Silvia y Lizardo compartieron un poco de su música trovadora en esta loca cita, donde espero hayan conocido a nuestros indios e indias verdes, en su expresión más variada.

Los viajeros montarán su presentación audiovisual “Cuento Cantao” en variados lugares de Santiago, comenzando por “La Barcaza” (Santa Isabel 0350, Ñuñoa) hoy martes en la noche, a lo que seguirán otros bares que detallaré pronto.

En dos semanas más, Silvia y Lizardo visitarán Valparaíso, para después seguir viaje hacia Argentina y Brasil, antes de retornar a su patria con la guitarra llena de caminos.

Este es un panorama recomendado 100 %, un imperdible, no sólo por la bella voz del trovador, sino por las historias que hay tras cada una de sus composiciones. No dejen de verlos.


Lizardo y Silvia: Presentaciones de junio en Santiago de Chile

Martes 7: La Barcaza

Jueves 9: Pub La Otra Casa

Viernes 10: La Casa en el Aire / Dirección: Antonia López de Bello #0125, Barrio Bellavista / Fono: 7356680 / Hora: 21:30

Domingo 12: La Casa en el Aire / Hora: 21:30

Viernes 17: El Sindicato / Dirección: Mipú 424 (entre Compañía y Catedral), Barrio Yungay, Metro Quinta Normal / Hora: 20:00

Sábado 18: El Sindicato / Hora: 20:00
La Casa en el Aire / Hora: 21:30

Domingo 19: La Casa en el Aire / Hora: 21:30

Jueves 23: Centro de Estudios Brasileños / Dirección: Embajada de Brasil, Avenida Libertador Bernardo O'Higgins 1650, Metro Los Héroes / Teléfono: 6720097 / Hora: 19:00
La Casa en el Aire / Hora: 21:30

Viernes 24: Bar Naitún / Dirección: Ricado Cumming 453, Barrio Brasil, Metro Cumming / Fono: 6718410 / Hora: 22:00

lunes, mayo 30, 2005

Periodismo, blogs y reporteros ciudadanos


Hace algunas semanas leyendo el blog de María Pastora supe de su participación en el periódico coreano digital “Oh My News” y de su posible viaje a ese país asiático, para formar parte de un foro de periodismo participativo los últimos días de junio, invitada por este medio digital.

“Oh My News” es un periódico online que convirtió a los lectores en reporteros, para así tener aquellas noticias que van más allá de los datos entregados por las agencias informativas. Gracias al éxito de la experiencia, hace algunos meses el periódico abrió su versión en inglés y aunque no tengo mucho tiempo yo también decidí participar.

Hasta el momento escribí dos artículos para ellos y aunque pensé que se trataba de una colaboración gratuita me pagaron en Won, la moneda coreana. Además de lo divertida que me pareció la oportunidad, me entrevistaron para el portal periodístico estadounidense Poynter, para conocer mi experiencia y saber por qué una periodista hecha y derecha se interesaba en participar en un proyecto de periodismo ciudadano. Yo respondí algo así como: “… decidí participar porque estoy atravesando un momento de gran entusiasmo en mi carrera, colaborando para diferentes iniciativas innovadoras. Además me pareció una buena oportunidad para mejorar mis habilidades en inglés, obligándome a escribir y pensar en otro idioma”.

Pero más allá de mi experiencia personal y del poco tiempo que tengo para ser una “citizen reporter” constante, el tema del cruce entre el periodismo, los blogs y la partición informativa ciudadana da para mucho y créanme que es una bola de nieve que recién comenzó a rodar. De hecho, el diario “El Mercurio” publicó el viernes 27 de mayo un artículo más noticioso que reflexivo sobre este tema que ya se empieza a colar en los medios tradicionales.

Uno de los aspectos más interesantes que preocupa incluso a los editores de “Oh My News y otras instancias similares, es la veracidad de la información que recogen estos periódicos y los datos contenidos en los blogs que logran congregar a muchos lectores: cómo saber qué es periodismo y qué no lo es, qué es verdad y qué no lo es, discusión que mantuve recientemente con el gran periodista y maestro Abraham Santibáñez, cuando conversamos sobre el cruce entre periodismo y literatura. El problema está en que hay gente que inventa uno o dos datos para potenciar el estilo, pero después no paran y eso es muy peligroso, me dijo Santibáñez. Yo, a modo de retroalimentación le mandé unos post de Orsai que son de antología. "El hombre que sueña con todo lo malo"; "Las llagas de Waiser" y "Lado B: canciones lentas".

Esto avanza tan rápido y tiene tantas aristas que creo que yo y muchas otras personas que trabajamos insertos en medios digitales aún no alcanzamos a dimensionar. De hecho, debo reconocer que estoy abrumada y fascinada al mismo tiempo con todo lo que está pasando a mi alrededor.

Supongo que de esto y mucho más hablaremos en el encuentro bloggero del 5 de junio.

Cultura blogger
Todo esto es definitivamente un fenómeno y lo que más me preocupa es que dudo que se pueda estudiar o definir, porque estamos en el centro del huracán, donde todo se mueve y todo avanza. La tecnología no para y nadie se puede bajar. Sin embargo, recientemente Roberto Arancibia, nuestro padre bloggero, siguiendo a Loïc Le Meur publicó publicó algunos lineamientos que de algún modo podrían “describirnos”. Todos me parecen muy acertados y los reproduzco aquí:

- Los bloggers tienen la voluntad y el deseo de compartir sus pensamientos y experiencias con otras personas.
- La creciente importancia de saber lo que otros piensan acerca de una idea o de una opinión concreta. En cuanto se construye una comunidad alrededor de un blog, su autor tiende a plantear más y más cosas a los miembros y lectores de ese grupo.

- Los bloggers se ayudan mucho unos a otros, siendo incluso capaces de lanzar proyectos colaborativos, que sería muy difícil, si no imposible, lanzar en forma unilateral.

- Conseguir información diaria de un gran número de fuentes se convierte en una necesidad cada vez más importante para la mayoría de los bloggers, que acaban leyendo decenas o incluso cientos de fuentes diariamente.

- Los bloggers quieren tener el control de la forma en que leen las noticias, no quieren que se las ofrezcan como si se tratara de la verdad absoluta, que es lo que hacen la mayoría de los medos tradicionales.

- Los bloggers tienden a ser "ciudadanos del mundo", leen fuentes internacionales y quieren conocer a personas de otras partes del mundo.

- Los bloggers se relacionan en la vida real. Una vez que construyen una comunidad virtual, organizan encuentros o conferencias para juntarse y conocerse.

- Existe un "código compartido": un vocabulario, un estilo propio de escritura y códigos de conducta (citar otras fuentes cuando las utilizas, enlazar esas fuentes, etc.).

- Los bloggers están tan habituados a proporcionar retroalimentación (en forma de comentarios) en otros blogs, que se sienten frustrados cuando miran, leen o escuchan a los medios tradicionales, y no pueden realizar esos comentarios.

- Es un hecho que los bloggers invierten mucho tiempo en sus blogs, quitándoselo normalmente a los medios tradicionales, a su tiempo libre y a sus horas de sueño. Esa irresistible voluntad de compartir con los demás es un vínculo en común muy fuerte.

- La cultura de la velocidad: la necesidad de postear o reaccionar de forma instantánea.

- La necesidad de reconocimiento. Los bloggers quieren expresarse y ser reconocidos por ello, lo cual ha provocado que muchos observadores externos hayan descrito a los bloggers como "grandes egocéntricos con mucho tiempo libre"


P.D. Lo que menos tengo es tiempo libre.