Al poner un pie sobre el bus que me transportaría, la experiencia intercultural se tornó aún más profunda, cuando noté que el chofer de esta máquina del TranSantiago estaba, en parte, vestido como el Viejito Pascuero y, junto a su mujer, deseaba feliz navidad a cada nuevo pasajero y a las personas que lo miraban sorprendidas desde la calle cuando paraba para recibir más habitantes de su particular trineo.
Los saludé y me quedé junto a Guillermo y su esposa, para ofrecerles protagonizar un capítulo navideño de “Paloma TV”, a lo que accedieron gustosos. Me explicaron que su objetivo era regalar alegría y amor, me contaron un montón de anécdotas y me regalaron un montón de la complicidad que tenían al mirarse a los ojos.
Predicar y practicar el amor. Eso es Belleza!!!!
Me sumo a su mensaje para un 2009 de paz y amor en el mundo.